José Francisco Ossandón Estay, nació el 19 de noviembre de 1938.


INTRODUCCIÓN
Cuando me preguntan desde cuando comencé a dibujar, contesto, “desde siempre”, y al “por qué” lo hago, solo puedo decir que es porque ya es un hábito necesario y constante, uno dibuja en la mente, como dibuja en el papel. Todo esto en un afán de comunicar ideas y sentimientos a través de las formas. Las cosas, las personas, los animales, la misma naturaleza nos habla, nos muestran su belleza y más que eso su esencia que es la base de toda existencia. Para mi el arte es una actividad eterna, primordial que intenta ver en cada cosa toda la fuerza de vida que emana de ellas. Es así como esta actividad se transforma en el trabajo principal que he desarrollado durante todos estos años, quedando esta disciplina en primer lugar frente a cualquiera otra ocupación o necesidad. Responder el “para qué” de esta elección de vida, puedo explicar que todo surge de la imperiosa necesidad de llevar a concreción todo aquello que viene a la mente y de la propia sensibilidad, cargada de mensajes, los cuales busco comunicar al espectador, quien dará su propia interpretación haciéndose partícipe así del proceso artístico. En el año 1960, puse mis pies en la tercera región, en la ciudad de Copiapó; fue como un despertar, poco a poco la zona se apoderó de mi y comencé a sentir toda la fuerza de su paisaje, del valle y del desierto, de su gente en sus faenas mineras y tradiciones, podría decir que aquí es donde nació mi arte, como artista se debe amar el entorno, su patria, su región y todas las cosas que la conforman por muy simples que estas sean. El metal, la piedra, los viejos pimientos, el sacrificado minero que ha fuerza bruta desarrollaba su trabajo, los cargadores, en fin, todo empieza a plasmarse en mi obra. A mi parecer existen varios tipos de artistas, están los que no pintan ni dibujan, pero sienten el arte, la naturaleza y disfrutan contemplando, otros que la reproducen en todo su esplendor, está también el artista que además de contemplar y reproducir, siente la necesidad de expresar, comunicar fuerza, sentimientos, ideas y opiniones, para gritarlas y ser escuchados a través de sus obras, lo que lo lleva más allá de pintar una fruta, un paisaje o una persona en particular, es comunicar con ello la fuerza de toda su existencia. Es así como con Vincent Van Gogh Y Gauguin nace el expresionismo, que con el muralismo mexicano de Diego Rivera y Siqueiros surge el expresionismo americanista, cuyas corrientes he adoptado para mis realizaciones, me defino como un artista expresionista, americano y chileno. Durante mi quehacer artístico he recurrido a distintas técnicas para plasmar una idea, según su naturaleza expresiva utilizando disciplinas como son: la pintura, escultura, técnicas digitales (video) y expresiones corporales. Pienso que eso es lo grandioso, poder entregar al espectador sentimientos de belleza, fuerza y mensajes a través de las artes. En resumen considero que esta zona nortina fue la que me dio el punto de partida para mis realizaciones las cuales seguiré desarrollando, con el afán de todo creador que es encontrar la mejor forma de comunicar plásticamente toda la fuerza que emerge de la tierra, de la vida misma de este país, el cual es rico en elementos que nos definen haciéndonos poseedores de una identidad. Es así como he llegado a catalogarme como un artista Expresionista Latinoamericano Nacionalista.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Profe, le conté raudamente un día que pasé como rayo veloz por su exposición en Copiapó, la emoción que sentí verlo nuevamente, la alegría de saber que el artista sigue vivito y coleando. Lo felicito nuevamente. Viví a una cuadra del Estadio Techado y derramé lágrimas al no poder revelarme ante tan brutal genocidio del arte. Lo pintaron de blanco.
Ese día me enamoré perdidamente de los zapallos, pero no lo pude ir a rescatar, espero no los haya vendido.
¿Ha pensado en abrir una academia en este Copayapu?
Felicitaciones amigo. Espero que sus zapallos adornen algún día mi hogar copiapino, hace 35 años que estaba por otros lares.
Adriana Aguirre
palomilla44@hotmail.com

Unknown dijo...

Fue mi profesor en la escuela República del Ecuador. Jamás olvidaré sus murales en la pizarra de tiza que estaba en el pasillo de abajo . Dibujos hermosos que aún están en mi memoria después más o menos 17 años ...muy buenos recuerdos. Saludos al profe Ossandón lo recuerdo con mucha admiración

Anónimo dijo...

Fue mi Profesor, en la Escuela de Música de Copiapó y conocí a su familia ... fue una grata sorpresa encontrarlo.